Pues nada, las heridas después de la "caída de la escalera" del post anterior, realmente son sólo unos rasguños sin importancia, aunque hace un par de días "picaban". Nada!, no hubo fracturas, no hubo daños internos y el agua oxigenada, las tiritas y los efferalganes han ejercido su función, con lo cual, en un par de días ya estaré como nuevo.
La verdad es que hay más escaleras que descubrir, que subir y probablemente sin tantos obstáculos ocultos...
domingo, marzo 29, 2009
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Fumado por
Pipero
12:00 p. m.
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Publicar un comentario 4 volutas:
¿Y lo que se fortifican los músculos de subir y bajar tanta escalera?
M@r
11:49 a. m.
Sobre todo los abductores! JEJE
Gracias, Mar!
11:59 a. m.
Lo importante es saber desde qué altura te has caído.
¿Por qué escalón ibas?
;-)
11:20 p. m.
Creía que ya había subido una buena porción, pero otro tema es que el final de la escalera estaba muy, muy lejos. Por ello el tortazo ha sido menos de lo que pudiera haber sido.
9:08 a. m.