Veo el mundo entre volutas

Un año más, como el año pasado y el anterior, los premios Ignobel son noticia. Se trata de unos premios promocionados por la revista científico-humorística, Annals of Improbable Research y premian lo más friki de la ciencia, algo que por una parte te hace reír y por otra te hace pensar, no sólo en la intención última de algunos tipos de ciencia sino a qué dedican el tiempo y el dinero libres, algunos países. Este año, nuevamente, supera a los años anteriores. A destacar:

Aviación: Los argentinos Patricia Agostino, Santiago Plano y Diago Golombek, por descubrir que los hámsters se recuperan mejor del jet lag si ingieren el estimulante sexual Viagra.

Biología: La holandesa Johanna van Bronswijk, por realizar un censo de los ácaros, arañas, crustáceos, bacterias, algas, helechos y hongos que residen en las camas de los seres humanos.

Economía: El taiwanés Kuo Cheng Hsieh, que ha patentado un dispositivo que lanza una red para capturar a atracadores de bancos.

Física: L. Mahadevan, de la Universidad de Harvard, y Enrique Cerda Villablanca, de la Universidad de Santiago de Chile, por su estudio sobre cómo se arrugan las sábanas.

Lingüística: Lo más destacado para nuestro gran esfuerzo y potencial científico pues tenemos ganadores catalanes. Se trata de Joan Manuel Toro, Josep Trobalon y Nuria Sebastián, de la Universitat de Barcelona, por un estudio que demuestra que las ratas a veces no distinguen entre el japonés y el holandés cuando las personas hablan esas lenguas al revés.

Medicina: El británico Brian Witcombe y el estadounidense Dan Meyer por un análisis de los efectos secundarios de introducirse espadas por la garganta y la conclusión de que esta práctica ocasiona irritaciones. Como prueba han presentado el caso de un hombre que se hizo daño en el esófago y al que se le inflamó la membrana protectora de los pulmones "cuando le distrajo un papagayo que tenía en el hombro y que se estaba portando mal".

Nutrición: Brian Wansink, de la Universidad de Cornell, por estudiar el apetito de las personas, al darles un plato de sopa sin fondo en el que nunca se acababa su contenido.

Paz: El Laboratorio de la Fuerza Aérea Patterson Wright, en Dayton (Ohio), que ha sopesado fabricar una "bomba gay" para provocar la homosexualidad en el enemigo y con ello minar la moral y la disciplina de las tropas.

Química: El japonés Mayu Yamamoto por su método para extraer esencia de vainilla de los excrementos de la vaca.


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